Instalaciones muy limpias, aire acondicionado perfecto. El bufé es algo repetitivo.

Habitaciones con malas vistas al mar.

El hotel es grande, limpio y tiene una zona de piscina maravillosa rodeada de jardines. Las habitaciones son amplias y las vistas al mar son un auténtico regalo. Ideal para relajarse tras un día explorando.

Pero bueno, los cobros por el seguro de la habitación son más excesivos que los últimos precios de la gasolina.

Recomiendo aprovechar las noches temáticas que ofrecen, son una excelente manera de disfrutar de la gastronomía local y conocer más sobre la cultura menorquina.

La pastelería francesa fresca fue un hallazgo espectacular, ¡los croissants estaban de locura! Además, el personal fue muy amable y las habitaciones con vistas al mar son una auténtica joya. El ambiente del hotel es ideal para relajarse, con una buena piscina para disfrutar el sol.

Aunque el buffet tenía buena variedad de postres, los platos principales eran un poco predecibles y se repetían más de lo que me hubiera gustado. Aparte, la habitación debía tener mejor aislamiento, ya que se colaba un buen ruido cuando soplaba el viento.

Desde que llegamos, la acogedora atmósfera del lugar nos hizo sentir en casa. Las instalaciones son modernas y están siempre impecables, lo que refleja el compromiso con la limpieza. La habitación es amplia y cómoda, ideal para relajarse después de un día de aventura. La piscina es impresionante, con una temperatura perfecta y un ambiente tranquilo, perfecto para nadar y desconectar. Además, poder disfrutar de una cerveza fresca y un helado durante las horas más calurosas fue un toque bien pensado. La amplia variedad de actividades organizadas cada día mantuvo a todos entretenidos y activos.

Sin embargo, el buffet podría ser más variado. a veces, nos encontramos con opciones repetitivas en las cenas.

cercanía a la playa y encanto local

además, su proximidad a restaurantes como el Cala Blanca y Xiringo hace que la cena después de explorar la zona sea súper cómoda y deliciosa.

Un hotel que se jacta de ser un paraíso y, sin embargo, ofrece comida insípida! Se supone que debía disfrutar de una habitación cómoda, pero me ofrecieron un cuarto ruidoso. ¡Y lo mejor! No recibí ningún tipo de atención especial que merezco por pagar tanto. Casi escribí una buena reseña, pero simplemente no pude.

Hotel molt net, amb personal super amable. Piscina genial, ideal per relaxar-se i gaudir del sol. Menjar bo, tot i que a vegades repetitiu. L'aire condicionat podria millorar, però en general, un bon lloc per passar unes vacances tranquil·les.

El Globales Mediterrani tiene una piscina impresionante rodeada de jardines, ideal para relajarse bajo el sol. Las habitaciones son cómodas y algunas ofrecen vistas panorámicas hacia Ciutadella. La variedad en el buffet es bastante buena, lo que hace que cada comida sea interesante.

Comidas repetitivas.

Las instalaciones son muy limpias y bien cuidadas, lo cual hace que la estancia sea agradable. La variedad en el desayuno es notable, con varios tipos de pan y opciones frescas que destacaron.

Sin embargo, la oferta gastronómica en el bufet puede ser repetitiva y la calidad en las cenas no cumplió con nuestras expectativas. tuvimos problemas con el aislamiento de la habitación, lo que dificultaba el descanso.

gran hotel pero los zumos mejorables

El hotel es amplio y tiene buenos accesos. La variedad en el desayuno es notable, con muchas opciones para elegir. La zona de la piscina es amplia y muy agradable para relajarse, además, la vista al mar es espectacular.

Los zumos de máquina no son de buena calidad, así como el café.